Seguro que nunca te habías hecho esta pregunta.
Un estudio sobre
la problemática de la soledad en la sociedad nos incitó a hacérnosla. Esperábamos
presentar aquí un análisis de sus lecciones para las empresas, pero al leerlo
nos dimos cuenta de que no ofrece respuesta a esa pregunta. No
obstante, pensamos que la pregunta ameritaba respuesta por lo que en este
articulo presentamos una aproximación a ello, basado en nuestra experiencia. Aunque
no comentaremos el contenido del informe, hacemos una breve descripción para
los que están interesados en la problemática a nivel de la sociedad, que es su
fuerte.
En este
artículo analizamos si la problemática la soledad debe ser parte de la
responsabilidad empresarial y, en caso positivo, cual debería ser la prioridad
en el contexto de las demás responsabilidades, su materialidad y como debería
afrontarla.
I.
Breve descripción del estudio.
Los resultados
fueron publicados en abril del 2025 en el informe Business vs. Loneliness Pathways to Action
Report: How Your Company Can Tackle the Loneliness Problem Through Profitable
Business Solutions
por la organización Economics of Mutuality Alliance (promotores de la
responsabilidad pero dándole ese “nuevo nombre”) basado en una investigación producida
por Mutual Value Labs y la Universidad de Manchester y financiada por Mars
Incorporated (una de las mayores empresas de golosinas y alimentos del
mundo y reconocida líder mundial en sostenibilidad).
El informe consta de tres partes:
- El panorama de la soledad: Comprendiendo el problema, donde presentan los resultados de amplias encuestas a más de 50 000 personas en EE. UU., Alemania, México, Reino Unido y China. Esta parte es muy rica en información sobre la situación en la sociedad y tiene valor agregado. Breves comentarios más abajo.
- La brújula del cambio en la soledad: Identificando estrategias de intervención eficaces, donde presentan el modelo, genérico, conceptual, de la iniciativa Economics of Mutuality, como base para el análisis de la participación de la empresa privada en el problema de la soledad. Sin comentarios.
- La Economía de la Mutualidad: Cómo diseñar e implementar intervenciones, donde presentan la aplicación del modelo al caso de la soledad. Lamentablemente se limita expresiones muy genéricas, usables para cualquier problemática empresarial, que no agregan valor a la preparación de estrategias específicas y su implementación. Sin comentarios.
Para los
interesados en la problemática empresarial es estudio es decepcionante. Tiene un énfasis sociológico y psicológico,
que si bien ayuda a entender el problema no ofrece ideas para la acción
empresarial. Ninguno de los autores tiene experiencia
empresarial, son todos académicos o funcionarios de instituciones sin fines de
lucro. Y solo uno de los ponentes en el webinar la tiene y que expone el
ejemplo de una cervecería checa que patrocina el estudio (¿nexo
soledad-cerveza?). [i]
b.
El problema de la soledad.
Comentaremos brevemente los resultados reportados en la primera parte del informe porque permite entender la problemática y apreciar la potencial responsabilidad empresarial, aunque su discusión se limite al nivel de la sociedad. Los principales resultados para estos efectos son:[ii]
- El 44% de los encuestados revela niveles moderados y altos de soledad,
- Contrario a lo que podría esperarse, el sentimiento de soledad disminuye con la edad, con el 29% para la generación Z (1997-2012) comparado con el 14% para los baby boomers (1946-1964)
- El 60 % afirma experimentar soledad “relacional” o “colectiva”, no solo soledad íntima. La falta de pertenencia.
- Las personas que no pertenecen a un grupo tienen 1,6 veces más probabilidades de sentirse solas.
- Quizás también sorprendente, es que más del 50% de las personas consideran que pasar tiempo a solas de forma positiva es una forma útil de superar la soledad.
¿Por qué debe
ser la soledad de interés para la empresas y los gobiernos? Para unos porque puede afectar la
motivación y productividad del empleado, para los otros porque, según muchos
estudios, afecta la salud mental y puede conducir a la demencia, depresión,
enfermedades cardiovasculares, derrames, suicidios y muertes prematuras.
II.
¿Es parte de la responsabilidad de la empresa?
El argumento para
considerar el problema a nivel de la empresa es que la soledad es un “problema
social” y por ende es parte de la responsabilidad “social” de la empresa. No es
responsabilidad de la empresa atacar todos los problemas sociales, pero ante
aquellos que tienen un impacto sobre sus actividades no puede ser indiferente. Es de recordar que esta problemática no forma
parte explícita del análisis de materialidad y de los riesgos y oportunidades
que se deben reportar de acuerdo con los estándares europeo e internaciones de
reporte y obviamente no hay indicares de reporte al respecto. Es posible que
para algunas empresas no sea una prioridad, pero ello no obsta para que lo
ignoren.
En principio
este problema puede parecer un poco alejado del impacto directo. Pero la soledad, en el sentido de
aislamiento involuntario, de desamparo, de falta de compañía, de falta de
pertenencia, [iii] es
parte de un problema mental, que puede influir en la productividad de los
empleados, su motivación y en el ambiente laboral, claro está que
dependiendo de su extensión y profundidad.
Por otra parte,
aunque no suele ser considerado en el análisis de la responsabilidad empresarial,
es posible que los productos y servicios de la empresa tengan impacto en
otros integrantes de la sociedad, más allá de sus empleados. A continuación,
analizaremos la responsabilidad de la empresa ante la problemática de la
soledad en esos dos niveles, interno y externo.
a.
A nivel interno a la empresa
A nivel interno
en la empresa no se puede esperar que se atienda a la salud mental de sus
empleados, que es afectada por muchos factores exógenos sobre los cuales no
puede ejercer control. Pero puede, en
particular, ofrecer programas educativos para diagnosticar la problemática y
ofrecer apoyo, ya sea para la autogestión, ya sea a través de sus beneficios
sociales. Por ejemplo, como parte de los beneficios médicos que ofrece vía
sus programas de seguros médicos y a través de las unidades de atención médica
que tenga in situ.
Por otra parte, la
cultura empresarial y el ambiente laboral pueden contribuir ya sea a ampliar el
problema ya sea a mitigarlo. Sin
pretender ser exhaustivos mencionaremos algunas oportunidades. La cultura de
tolerancia, de trabajo en equipo, de fomento a la camaradería (oportunidades
para la celebración de eventos colectivos, ya sea de trabajo, ya sean lúdicos,
de reuniones que involucren a las familias, [iv]
espacios propicios para la interacción, etc.), de reconocimiento del apoyo
mutuo y procesos expeditos para la resolución de conflictos, entre otros pueden
ayudar a mitigar el problema interno. Una cultura de inclusividad puede
contribuir a evitar el aislamiento.
Pero esa misma
cultura y ambiente laboral puede exacerbar el problema. En culturas
competitivas se crea un entorno de lucha por los recursos comunes, con el
consecuente individualismo, que puede contribuir al ostracismo de algunos
empleados, los “no ganadores”. En culturas autocráticas y burocráticas, se
crea un entorno de obediencia y seguimiento incuestionado a las reglas y
los jefes, lo que puede conducir a una situación de indiferencia, aislamiento,
no pertenencia (“yo solo trabajo aquí”, “no es mi problema”).
Esta problemática se puede exacerbar con el trabajo remoto, que si bien tiene ventajas en términos de la
utilización más eficiente del tiempo (ahorro del tiempo y del stress del
desplazamiento), de flexibilidad, que facilita la conciliación de la vida laboral
con la familiar, entre otros, también puede fomentar la soledad, sobre todo atentar
contra el sentido de pertenencia a un equipo (el estudio mencionado arriba
lo identifica como una de las causas de la soledad) y la integración de
todos los empleados a la cultura empresarial, necesaria para la efectividad
empresarial. La empresa debería balancear los costos con los beneficios.
b.
A nivel externo de la sociedad
El efecto externo
es menos generalizado y aplica a un reducido número de empresas, pero que
pueden tener gran impacto en el problema a nivel de la sociedad. Es un impacto relativamente reciente,
mayormente como resultado de los desarrollos tecnológicos que permiten al individuo crear su propio mundo, aislándose
del resto de la sociedad y contribuyendo a la soledad. Es el caso de las redes
sociales y los videojuegos.
El caso más
paradigmático es el de las redes sociales, en especial Facebook, donde se crean
“amigos” virtuales, donde el éxito se mide por el número de likes o
reenvíos que el posting reciba. Donde las comunicaciones con los “amigos”
se reducen a intercambios de pocas palabras. Permiten “pasar tiempo a
solas”, pero en contexto negativo.
Estas tecnologías
han conducido a reducir el contacto directo. Se habla menos por teléfono, se
prefiere enviar SMS o WhatsApp, lo que sustituye el contacto humano, donde el
intercambio puede ser más extenso, percibiéndose las emociones y aclarando
confusiones más efectivamente.
Algo peor sucede
con los videojuegos, donde es asilamiento es casi total, sin interacción
directa, a lo sumo se
juega con o contra un “amigo” desconocido.
Si bien son fuente de entretenimiento, distracción y escape de la
realidad cotidiana, lo que permite “pasar tiempo a solas”, pero en contexto
negativo.[v]
[vi]
Con esto no queremos
decir que estos productos y servicios no cumplen una valiosa función social al
facilitar contactos e intercambios, (¡qué haríamos sin el WhatsApp!), pero pueden tener efectos nocivos, contribuyendo
a la soledad y sus consecuencias sobre la salud mental y física.
Todo ello conlleva a una reducción del capital social, que es el valor colectivo de las redes y
conexiones sociales, que ofrece numerosos beneficios para las personas, las
comunidades y la sociedad en su conjunto. Este capital puede mejorar la
salud, impulsar las oportunidades económicas, fomentar la participación cívica,
la confianza mutua, la cooperación, el sentido de pertenencia lo que puede
incluso generar una mayor cohesión social.
Y se está
produciendo un fenómeno que corrobora este aislamiento. Ha habido un aumento
significativo de las reservas de viajes y de alojamiento para personas solas.[vii] Esto
puede ser reflejo de la soledad, pero también puede ser indicador de la
búsqueda de “pasar tiempo a solas” de forma positiva. El estudio
mencionado arriba reporta que las personas creen que esto es una forma útil de
superar la soledad. Pero estar tiempo a
solas también puede ser muy negativo, puede conducir a la depresión, a la imaginación
de problemas inexistentes, a la baja en la autoestima. La clave está en encontrar la forma positiva de estar
solo, como fuente de recuperación mental y espiritual.
Un caso
paradigmático de esta disyuntiva es el de las bebidas alcohólicas. Hay quien diría que contribuyen a aliviar el
problema de la soledad, ofreciendo oportunidades para la compañía, la
camarería, intercambios humanos y no virtuales.
De hecho, esto es la base de sus propagandas. Pero no todo el consumo de
alcohol es positivo, para algunos es un antídoto a la soledad, con efectos colaterales
negativos.
¿Qué pueden hacer
estas empresa para aliviar la problemática de la soledad? Muy poco, sus productos y servicios difícilmente
pueden ser modificados para atenuar el impacto. De hecho, la
soledad constituye para ellos un mercado a explotar.
“La gente se siente sola, quiere más amigos, y
nosotros podemos ayudar”.
Mark Zuckerberg,
CEO de Meta (Facebook).
Su nueva
familia de productos de inteligencia artificial ….ya no solo contesta
correos: te escucha, te acompaña, te responde como si le importaras. Se
disfraza de vínculo. Pero esta no es la respuesta a la soledad. Es su
explotación. Hoy, esa soledad ya no es sólo una
tendencia: es un modelo de negocio……. Lo que antes se tejía en bares o plazas, hoy
se simula en plataformas que optimizan la interacción, pero desactivan el
encuentro.
Elsa Arnaiz
Chico, presidente, Talento para el futuro. [viii]
Algunas de las
empresas de estos productos y servicios tratan de promover el consumo
responsable, a través de la educación o de apoyo a los “adictos”, como es
el caso de las empresas de bebidas alcohólicas y casas de apuestas. Pero estos programas no suelen ser muy
efectivos ni atacan el problema de la soledad.
En algunos
casos se recurre a la regulación por parte de los gobiernos, como, por ejemplo, la mayoría de edad,
en los casos de bebidas alcohólicas, casas de apuestas y pornografía. Pero la población más afectada suele ser la
no cubierta. Por otra parte, los productos y servicios de las redes sociales
y los videojuegos suelen ser menos amenos a la regulación ya que el consumo es
en privado y los impactos (soledad, por ejemplo) silenciosos, menos tangibles
que, digamos el consumo de alcohol. A lo sumo se regulan algunos de sus
contenidos (violencia, odio, pornografía, etc.).
¿Y la autorregulación en estos productos y servicios? Bien, gracias.
III.
En resumen
La soledad de los
empleados y el impacto de sus productos y servicios sobre otros es un aspecto
raramente considerado en la responsabilidad de la empresa ante la sociedad. Sin
embargo, la soledad afecta la motivación, la productividad, y la cohesión dentro
de la empresa. Externamente, los productos y servicios pueden contribuir a fomentar
la soledad con consecuencias negativas sobre la salud mental y física de sus
usuarios y clientes.
Es entonces razonable
pensar que la empresa debe considerar sus impactos y tratar de evitarlos y mitigarlos.
Internamente la empresa puede fomentar una cultura de inclusión, de tolerancia,
de mutuo apoyo, de camaradería. Además, puede incluir su mitigación como parte
de los beneficios sociales, sobre todo en sus seguros médicos y los servicios
internos que pueda tener de apoyo a la salud física y mental.
Externamente, los
impactos son más focalizados en empresas intensivas en el uso de tecnologías,
particularmente en las redes sociales y los videojuegos, que facilitan que las personas se creen sus propios
mundos aislados de la sociedad,
con amigos electrónicos, lo que puede afectar su salud mental y física. Pero esos productos y servicios forman parte
de su razón de ser y esas empresas no tienen interés alguno en reducir su
consumo. La educación sobre las consecuencias es una posible herramienta de
mitigación, pero suele ser poco efectiva, ya que muchas veces se trata de una
“adicción”.
Por otra parte, la
regulación de los impactos en la sociedad por parte de los gobiernos es más difícil
ya que suelen ser intangibles (salud mental), notables solo en el largo
plazo y no atribuibles a productos y servicios específicos.
Y estas empresas no
tienen incentivos para la autorregulación. Difícilmente sus stakeholders
se preocupan del asunto.
Pero todas las empresas deberían asumir como parte de su responsabilidad ante
la sociedad sus impactos sobre la soledad y tomar las medidas para mitigarlos .…..
por su propio bien. No es solamente una
obligación moral, es también económica.
[i] El video del webinar (una
hora) de la presentación del estudio se puede ver aquí.
[ii] En España, una de cada nueve personas vive sola, y el
28% de los hogares son unipersonales. En Estados Unidos, uno de cada cinco
adultos en Estados Unidos se siente solo a diario.
[iii] En inglés hay dos palabras para
caracterizar la soledad, loneliness y solitude, que en
español son la misma palabra: soledad. Pero tienen dos connotaciones
diferentes, la primera es la soledad en este sentido de aislamiento involuntario,
en tanto que la otra, solitude, tiene el sentido de asilamiento
voluntario, muchas veces deseado, como fuente de recuperación mental y
espiritual.
[iv] Una investigación sobre la percepción
del bienestar en las personas encontró que comer con otras personas, en
comparación con comer solo, era un indicador sorprendentemente tan
estadísticamente significativo como los ingresos y la situación laboral. Esto
se mantiene incluso al considerar otros factores, como la edad y la educación.
Y que América Latina es el líder global en la comida colectiva (aunque supondría
que también es el caso de España e Italia).
[v] El sospechoso de la masacre el 10
de junio del 2025 en Graz, Austria era un solitario, adicto a los videojuegos
violentos.
[vi] Los investigadores descubrieron que
los niños con un uso altamente adictivo de teléfonos, videojuegos o redes
sociales tenían entre dos y tres veces más probabilidades de tener pensamientos
suicidas o de hacerse daño: Addictive
Screen Use Trajectories and Suicidal Behaviors, Suicidal Ideation, and Mental
Health in US Youths.
[vii] Airbnb reporta que las búsquedas de
viajes en solitario han crecido un 80% esta primavera en comparación con el año
pasado. Ver dos artículos en The Economist que analizan
este fenómeno: Travel
buddies are out; solo trips are in: More people are going on holiday alone
y The
rise of the loner consumer: Solo spenders are a new economic force
[viii] Recomendamos el incisivo y mordaz
artículo Los amigos imaginarios de Mark Zuckerberg:
Hipercapitalismo emocional y el millonario negocio de la soledad, publicado en la revista Retina del
periódico El País de España (junio 2025).
No hay comentarios:
Publicar un comentario