domingo, 29 de junio de 2014

Sabes que trabajas en RSE cuando ..........



Segun Julien Goy [i]:

…el 80% de la gente que te encuentras no sabe qué quiere decir eso.

…el otro 20% 
​​pretende que lo sabe pero rápidamente cambia de tema.

…en la oficina nadie te ve como una amenaza.

…en los sitios de búsqueda de empleo las opciones que seleccionas para “educación”, “experiencia de empleo” y “empleo deseado” es siempre la casilla “otro”.

…eras estudiante todos creían que lo que tú querías ser era trabajador social.

…las conferencias para hacer networking te son inútiles: siempre van los mismos.

…tu sabes que las mejores oportunidades de empleo son en empresas para las cuales, por principios, no trabajarías.

…cuando escribes cartas introductorias empleas 20 minutos buscando una alternativa a la palabra “responsabilidad” para referirte a responsabilidad social.

…para cada anuncio de empleo hay por los menos 150 candidatos

…los amigos que cambian carrera porque quieren tener un empleo que “me llene” te hacen reír.




Y yo añado…………………..

…hace varios años que no lees nada sobre la profesión que no hayas leído ya.

… no entiendes cómo es posible que nadie vea las ventajas de lo que propones en el trabajo.

…todos te dicen que tus ideas son excelentes pero después no pasa nada.

…tus hijos y tu madre no entienden en que trabajas. Tu pareja no te pregunta.

... tus compañeros de trabajo creen que vives en un mundo de ficción.

…los que han tomado un curso por internet de 8 horas creen que saben mucho más que tú.

…retuiteas los tuits sin leer los nexos.  Imposible que te digan algo que no sepas.

….hay más autores que lectores en tu área de experiencia.




[i] Traducción de un blog de Julien Goy, publicado el 26 de junio de 2014 en 2Degrees Community.

domingo, 8 de junio de 2014

Una buena estrategia de sostenibilidad: Autodesk


Este es solo mi segundo artículo revisando un informe de sostenibilidad.  He escrito mucho sobre los reportes de sostenibilidad pero no sobre informes particulares.  El anterior fue sobre el primer informe del Global Reporting Initiative, GRI. Pero decidí analizar este informe por la oportunidad que brinda de comentar su estrategia de sostenibilidad y el buen ejemplo que da para la sostenibilidad en otras empresas.

Cuantas veces no hemos visto informes de sostenibilidad destacando trivialidades como los premios ganados por las empresas, el mantenimiento de alguna zona verde, donaciones a alguna institución de caridad, la construcción de alguna escuelita, el voluntariado de algunos de sus empleados, el respaldo a algún museo y dejando de lado la discusión de temas importantes para la sociedad como el impacto que sus productos y servicios tienen o dejan de tener,  el cabildeo que hacen contra las regulaciones, su  impacto sobre las condiciones laborares y sobre el medio ambiente en su cadena de valor, entre otros.

Es cierto que con las nuevas directrices del G4 del GRI se enfatizará reportar sobre lo que sea material para las empresas y sus partes interesadas, pero es muy posible que lo que sea identificado como material será aquello sobre lo cual la empresa ya está actuando.  Además ello solo aplicará al reducido número de empresas que elijan reportar en base a esas directrices.  La gran mayoría de las empresas que producen reportes formales continuaran haciéndolo a su mejor manera y aun las que elijan reportar en base al G4 tendrán la tentación o la presión interna y externa de destacar aspectos que no son los más materiales (Información sobre sostenibilidad: ¿Es malo que no digan toda la verdad?).

Un caso muy paradigmático de este problema fue el mismo GRI en su primer informe de sostenibilidad donde se enfatizaban trivialidades como el consumo de papel, reciclaje y los viajes de sus funcionarios e ignoraba por completo el impacto de sus productos (Informe de sostenibilidad del GRI: En casa de herrero, cuchillo de palo).  No comentaban sobre lo más importante para el GRI:  Qué impacto tienen sus productos (en aquel entonces los lineamientos G3) en el avance de la sostenibilidad empresarial.   En aquel artículo comentaba que “Yo pensaba que su impacto en sostenibilidad era como se avanzaba en la producción y diseminación de informes sobre sostenibilidad  relativamente comparables”……. “Qué diríamos de un informe de sostenibilidad de una tabacalera o de una productora de licores que no menciona el impacto de los cigarrillos o del alcohol y se limita a hablar del trabajo con las comunidades o la educación de los jóvenes sobre el peligro del tabaco o el alcohol? ¿Qué diríamos del informe de una petrolera que ignora el impacto de sus productos en las emisiones de gases de efecto invernadero?  Lamentablemente ese suele ser el caso de estas empresas.”

Por estas razones hemos querido comentar sobre el informe de sostenibilidad de Autodesk como un ejemplo de una estrategia de sostenibilidad relevante, bien informada, que gira alrededor del producto.  Es un caso laudable de priorizar la estrategia y luego reportar, a diferencia de muchas empresas en las cuales lo que se cree que se debe reportar es lo que influencia la estrategia que se desarrolla.






El informe incluye la información relativamente tradicional sobre emisiones, derechos humanos, empleados, consumo de recursos, responsabilidad en la cadena de valor y desarrollo comunitario entre otros.  También reporta los indicadores GRI y la correspondiente tabla-índice de referencia cruzada al contenido del informe, aunque el informe ni siquiera está preparado  de acuerdo a las directrices del GRI y no tiene calificación, solamente usa las G3 como base para su preparación. No comentamos sobre estos aspectos de sus actividades porque el objeto de este artículo no es analizar el informe, el objeto es analizar su estrategia, basada en las actividades reportadas en el informe. Todo esto en un informe de 20 páginas de texto.

¿Pero que es Autodesk?  Es más que posible que el lector no haya oído nombrar a esta empresa.  Al producir productos especializados es poco conocida y sujeta a menos escrutinio.  Con mayor razón para analizar su estrategia, en gran parte desarrollada por convicción propia y no por presiones externas.

Autodesk [1] es una empresa basada en San Francisco que produce software para diseño industrial en dos y tres dimensiones, para arquitectura, ingeniería, construcción, manufactura, y para la producción de diseño visual para medios y para la industria del entretenimiento.  Por ejemplo el software se usa para el diseño de edificios, con tal nivel de detalle que incluye las estructuras (ingeniería y arquitectura)  y todos los servicios necesarios,  incluyendo en el software la posibilidad de probar, virtualmente, diferentes opciones de construcción y diseño y someterlos a pruebas para determinar y mejorar la eficiencia energética, el consumo de recursos y su operación, entre otros. También es ampliamente usado para el diseño de automóviles y todas sus partes.  Muchos de sus clientes son grandes empresas pero también tiene clientes individuales para sus productos de diseño visual.  Este video de la empresa es mucho más explicativo que cualquier descripción.


(si no puedeos verlo en la imagen, miralo aquí)

El primer pilar de la estrategia de sostenibilidad de Autodesk es el producto mismo y su contribución que hacen sus productos a la sostenibilidad de sus clientes, al permitirles optimizar sus diseños para hacer una mejor contribución a la sociedad.  Promueve la sostenibilidad de sus clientes por oferta, al incluir en sus productos la posibilidad del diseño sostenible.  Su sostenibilidad se convierte en factor competitivo ya que ciertamente los grandes clientes demandan la posibilidad del diseño sostenible.

Los diseñadores pueden acceder a información previamente inaccesible y entender los impactos potenciales de sus diseños en los sistemas en los cuales se integrarán.  Se pueden analizar y probar miles de posibilidades de diseño en minutos y pueden colaborar e interactuar con otros en el proceso de diseño.  Al acceder a información sobre el costo de los insumos y sus impactos ambientales se puede optimizar la sostenibilidad del diseño.

El segundo pilar de la estrategia es el entrenamiento sobre diseño sostenible, para tener un efecto multiplicador, y porque no, contribuir a la demanda de sus productos (más de un millón de estudiantes y educadores durante 2013).  El tercer pilar es la diseminación de la tecnología para el diseño sostenible a través del cual se hacen donaciones y descuentos de sus programas (que son costosos) a instituciones educativas, concientizando sobre la sostenibilidad, a grupos estratégicos, como los que promueven el desarrollo de tecnologías limpias y a instituciones sin fines de lucro.  Podría considerarse como un programa de filantropía estratégica a través del cual se abren posibilidades futuras del vender los productos, pero mientras tanto se contribuye al diseño sostenible en usuarios que de otra manera no tendrían acceso al producto y que posiblemente contribuyeran menos a la sostenibilidad.  El cuarto pilar es hacer lo que se predica, usando sus propios productos para hacer la empresa más sostenible y extendiendo la cultura de ética y sostenibilidad que se incorpora en los productos a sus propias operaciones y viceversa, incorporando la cultura ética de los empleados al diseño de sus productos.

Y por último son destacables las actividades de la Fundación de reciente creación (marzo 2014) que englobará las operaciones tradicionales de voluntariado, donaciones caritativas y trabajo con la comunidad.  Pero las actividades más destacables de la nueva estrategia son las que podríamos llamar filantropía de impacto a través de las cuales apoyan con personal propio y sus programas al diseño eficiente y sostenible de productos como bombas para agua, equipamiento médico de bajo costo y habitáculos para comunidades de bajos recursos.  Adicionalmente entrenan a los líderes comunitarios en el uso de sus programas para estos diseños.

Autodesk acaba de diseñar los programas básicos para su uso en diseño bi- y tridimensional de acceso público (open source) para que cualquier usuario pueda desarrollar sus propias aplicaciones.  Adicionalmente ha desarrollado metodologías, también de acceso público, para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.  El objetivo es promover el uso de avanzadas tecnologías de diseño computacional para el mejoramiento de la calidad de vida.  

Como se puede ver, su estrategia de sostenibilidad es internamente consistente, sus pilares se respaldan mutuamente y está integrada con el negocio de la empresa. Está basada en la contribución que sus productos pueden hacer a la sostenibilidad de sus clientes y otras partes interesadas. Es un buen ejemplo de cómo la estrategia de sostenibilidad gira alrededor de sus productos, lo cual no es un caso muy común.

A lo mejor es que cuentan el cuento muy bien, pero mi impresión es de tienen un buen cuento que contar.








[1] En aras de la transparencia: Uno de  mis hijos trabaja en la empresa como ingeniero de programación gráfica desde hace más de diez años.

domingo, 1 de junio de 2014

Seis mitos sobre los Derechos Humanos en las empresas



Lamentablemente existe mucha confusión sobre el papel de las empresas en el respeto a los derechos humanos (DDHH).  Continua vigente al creencia de que esto es un problema que solo concierne a los gobiernos y las grandes empresas multinacionales que operan en países en vías desarrollo, derivado en gran parte de la visibilidad de los casos más flagrantes de violación.  Pero ello refleja ignorancia de que lo que en realidad son los DDHH en el contexto de la empresa.





En gran medida el origen de la preocupación sobre el impacto de las empresas sobre los DDHH viene de las organizaciones multilaterales, en particular de la Organización de las Naciones Unidas, ONU, en el entorno de gobiernos y de instituciones de la sociedad civil. Ello crea, para los no expertos, la percepción de que es un asunto que no concierne a las empresas o que les concierne poco.  Claro está que esto es una percepción equivocada derivada del desconocimiento de lo que son los DDHH ya que las empresas, al trabajar para y con personas, afectan esos derechos y en algunos casos pueden tener un gran impacto, pero en todo caso tienen algún impacto

Buena parte de la dificultad de interesar a las empresas, sobre todo a las de menor tamaño, y a la sociedad sobre la necesidad del respeto de aquellas a los DDHH se debe a una ignorancia sobre su verdadero significado respaldada por la existencia de varios mitos, entre los cuales destacan los siguientes seis:

Mito I: Los DDHH son sólo un problema de gobiernos.  La atención de los medios de comunicación sobre el tema está dominada por eventos significativos, mayormente relacionados con la acción o falta de acción de los gobiernos.  En un caso por los abusos que cometen algunos regímenes sobre algunos miembros de la población, en particular privación de algunos derechos como la libertad física y de expresión, tortura o maltrato, asesinatos, etc. En otros casos por su complicidad en abusos cometidos a parte de la población, de algunas instituciones y de empresas.  Y cuando se habla en los medios de la protección de los DDHH se suele hablar de los juicios por crímenes cometidos en países en vías de desarrollo y de instituciones dominadas por gobiernos como la Corte Internacional de Justicia, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, la Corte Interamericana de Derechos Humanos y el organizaciones como la ONU, en cuyo seno se promulgo la Carta Fundamental de los Derechos Humanos.

Algunos titulares recientes son muy ilustrativos: “Una sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos puede sacar a decenas de terroristas a la calle”. “China aspira al Consejo de Derechos Humanos mientras arresta a los disidentes”, “México acepta rezagos en derechos humanos ante la ONU, responderá hasta marzo”, “Los premios a los derechos humanos desagradan a los dictadores”. “Human Rights Watch denuncia violaciones de los derechos humanos de los manifestantes en Venezuela”No es de sorprender si se piensa que los DDHH son un asunto de los gobiernos.

Mito II: DDHH son sólo un problema en áreas de violencia.  De la misma manera, gran parte de las informaciones de los medios sobre violaciones provienen de zonas de conflicto armado o zonas donde es intensiva la violencia.  Se menciona frecuentemente en el caso de Colombia, donde el conflicto civil lleva más de cincuenta años, en el caso de algunos países africanos, en el Medio Oriente, en particular en Siria, y en algunos países asiáticos como Myanmar y China.

Mito III: DDHH sólo conciernen a las multinacionales. Y cuando se menciona a empresas se suelen referir a las grandes multinacionales y otras empresas de gran tamaño, porque son las que por el volumen de negocios y cantidad de personal pueden tener un gran impacto.  El caso reciente más notorio son las violaciones en la industria textil de Bangladesh, que aunque son cometidas por empresas locales, se atribuyen a la conspiración o indiferencia de sus compradores, las grandes multinacionales del vestido.  También porque son las empresas de gran tamaño las que son objeto de escrutinio por instituciones de supervisión y control de la sociedad civil y las que denuncian los malos comportamientos.

Mito IV: DDHH sólo conciernen a la industria extractiva.   La industria extractiva (minería, hidrocarburos y forestal) tiene un elevado impacto económico, social y ambiental en las regiones donde opera, que además suelen cubrir grandes extensiones en regiones relativamente remotas de los países. Son comunes los reportes de violaciones de los derechos de las poblaciones indígenas y el resto de la población local, en particular eventos relacionados con violencia a las mujeres en la zona de influencia de la explotación.

Mito V: Violaciones de los DDHH sólo son un problema en los países en vías de desarrollo. Por la debilidad de la ley y de las instituciones de salvaguarda y la herencia histórica de conflictos, los casos más sonados de violaciones ocurren en efecto en países en vías de desarrollo. El menor desarrollo relativo también induce a estos países a ofrecer condiciones, implícita o explícitamente, más tolerantes para atraer a las empresas multinacionales o para el desarrollo de las locales.  Algunas de las violaciones no son de los estándares locales, pero sí de los internacionales. Pero no tienen el monopolio.  Ocurren en todos los países del mundo.  Véanse los casos de discriminación racial en EEUU, el tratamiento de inmigrantes en algunos países europeos, la supresión de libertades en Rusia, las condiciones laborales en Prato, Italia (donde la industria del vestido es dominada por inmigrantes chinos).

Mito VI: Las empresas sólo respetarán los DDHH si es obligatorio por ley.  En función de estos mitos también se cree que la única manera de que las empresas respeten los DDHH es incorporándolos en las leyes y regulaciones nacionales.  Algunos de los derechos ya están incorporados en las legislaciones y con otros es muy difícil hacerlo, y en caso de que se haga pueden ser muy difíciles de controlar en la práctica.  Adicionalmente, si se pretende regular para las empresas de peor comportamiento se imponen restricciones a las de buen comportamiento que pueden crear rigideces reduciendo la competitividad y en algunos casos el empleo o las condiciones salariales.  El control más conducente para las empresas, pero no el más efectivo en todos los casos, es el control que puede imponer la sociedad civil y el mercado, complementando el de los gobiernos.

Estos mitos, refuerzan el desconocimiento de los que realmente son los DDHH. Son palabras que se usan mucho pero que se desconoce lo que verdaderamente involucran y mucho menos cual es el papel de la empresa en el respeto de los mismos.  Hay una percepción en términos generales pero no lo suficiente como para que las mismas empresas tomen medidas y la sociedad actúe. [1]



(Este artículo representa la introducción al capítulo correspondiente que será publicado por la Fundación Etnor a finales de año como resultado de las ponencias en su XXIII Seminario Permanente:  ¿Para qué sirve realmente la ética en la empresa?)






[1] El lector interesado en más detalles sobre el papel de las empresas en el respeto de los DDHH puede leer mis artículos sobre Derechos Humanos y Empresa.