¡Un informe sobre
sostenibilidad empresarial en español!
Tratándose de un informe sobre América Latina era de esperar que lo publicaran
en español, pero no siempre es así. La
Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, OCDE (“un club de
países mayormente desarrollados” como lo define The Economist) ha
publicado el estudio Iniciativas de Sostenibilidad y Conducta
Empresarial Responsable en América Latina y el Caribe (esta vez
descargable de forma gratuita).
El objetivo de este artículo no es presentar un análisis detallado del
informe, su objetivo es ponerlo al conocimiento y estimular el interés de
los lectores que puedan beneficiarse de su estudio, para lo cual destaca
los aspectos más relevantes para las prácticas de la sostenibilidad empresarial
y presenta breves comentarios sobre la utilidad y limitaciones del informe.
I.
Introducción.
Hay que comentar
lamentando el título del informe porque no es confuso. La denominación “incitativas
de sostenibilidad” lleva a pensar de que se trata de un estudio sobre las prácticas
de sostenibilidad de las empresas, que representan una iniciativa, lo que
quiere decir “dar comienzo a algo”.[i] No, no
es así. El informe analiza la utilización, en América Latina, de
instrumentos (usaremos este término) de apoyo a la sostenibilidad,
como lo son las certificaciones, etiquetas, directrices, prácticas recomendadas,
etc. en aspectos ambientales y sociales.
Extiende la consideración
de aspectos de sostenibilidad, que se había iniciado con el informe Sustainability Policies and Practices for
Corporate Governance in Latin America, que habíamos analizado en un artículo anterior, Gobernanza
de la sostenibilidad en América Latina: informe recomendado. Decíamos que el informe representa
una referencia inédita sobre las políticas y prácticas en varios países de
América Latina en aspectos relacionados con la operatoria de las
empresas privadas, con énfasis en algunos de la sostenibilidad empresarial.
Después de ese
informe, el actual es de menor interés general, por cuanto se concentra en
un tema muy específico para sectores muy específicos, pero ante la carestía
de informes que analizan la situación de la sostenibilidad empresarial a nivel
de la región, y a pesar de su concentración, hace una valiosa contribución
por el hecho de considerar un aspecto poco desarrollado. Toda información
que contribuya a expandir el interés y profundizar sobre su adopción debe ser
bienvenida.
Según el resumen
ejecutivo:
Este documento presenta un análisis sobre el uso de las iniciativas de
sostenibilidad en los sectores agrícola y minero de América Latina y el Caribe
(ALC). A partir de un mapeo detallado de casi 40 iniciativas seleccionadas y
con base en los resultados de una encuesta realizada a más de 300
representantes de empresas, tiene por objeto promover la coherencia y
profundizar en la comprensión del contexto y el papel que juegan las
iniciativas de sostenibilidad en relación con la Conducta Empresarial
Responsable (CER).[ii]
Este trabajo identifica tendencias, retos y oportunidades clave, facilitando
un enfoque más integrado de la sostenibilidad en estos sectores críticos.
A continuación, describiremos
brevemente el contenido del informe y analizaremos las afirmaciones, enfatizadas
en negrilla en el resumen sobre sus objetivos y el valor agregado.
II.
El informe.
El análisis llegó
a identificar la utilización de 39 instrumentos de apoyo a la sostenibilidad
empresarial, [iii]desarrolladas
a nivel global (25), regional (2) y local (12), preparados por instituciones
independientes, organismos públicos y colectivos empresariales en los sectores
de agricultura y minería. Los clasifica en tres grandes grupos: (a) Verificación
(11): Son los estándares voluntarios que controlan, evalúan, verifican,
certifican, aseguran o comparan empresas, centros, productos, proveedores u
otros socios comerciales con dichos requisitos; (b) Facilitación (13): Son
los principios, guías, buenas prácticas, etc. que facilitan o informan la
gestión de sostenibilidad de las empresas, pero no evalúan ni certifican el rendimiento
de la empresa; y (c) Mixtos (15): los que contienen ambos aspectos.
El hecho de
analizar solamente dos sectores industriales podría parecer una limitación,
pero son estos sectores dos de los que más recurren a esos instrumentos por su
elevado impacto sobre el medio ambiente, sobre los trabajadores y sobre el
consumo de sus productos, y por su elevado potencial de contribuir al
desarrollo económico. [iv]
El informe se
basa en un mapeo de los instrumentos usados en los países de América
Latina y encuestas a 318 empresas, de las cuales el 63% han reportado
utilizar voluntariamente alguno de ellos y el 82% expresan su intención de
adoptar iniciativas adicionales en los próximos años (¿realidad, ilusión o sesgo
de las encuestas que estimulan respuestas positivas?).
Estos
instrumentos pueden contribuir y orientar a las empresas en la adopción de
prácticas responsables facilitando y verificando determinados procesos y la
identificación de riesgos. Las certificaciones incluyen prácticas y comportamientos de lo que las
empresas deberían llevar a cabo para optar a ellas. Tienen el objetivo de
proporcionar información condensada y tipificada sobre la sostenibilidad de la empresas
a las partes interesadas, en particular a los usuarios de los productos, con relativamente
mayor credibilidad que la información que proporciona de la empresa, ya que son
elaborados por entes independientes. Y pueden además ser utilizadas para
mejorar esa sostenibilidad con el objetivo de lograr la certificación o el
reconocimiento. Pero hay que recordar que suelen partir de un modelo idealizado,
universal, de lo que las empresas (en este caso productores) deberían hacer.
Para estos fines las empresas deben tener en cuenta lo que son sus aspectos
materiales y el contexto en que operan. Una cosa son los estándares y la otras
su aplicación en la estrategia. Esta no está exenta de problemas, como su
costo/beneficio y el poner la atención en aspectos que pueden no ser los más
relevantes para cada empresa en particular.
En el caso de los
estándares y las recomendaciones de buenas prácticas y de códigos de buena conducta,
también elaborados por entes independientes, tienen como objetivo contribuir a
esa mejora y, en general suelen ser más específicos. Muchas veces son elaborados
por asociaciones gremiales para fomentar buenas prácticas y mejorar la
reputación del sector ..… y a veces para anticiparse y prevenir regulaciones más
costosas. [v]
Al título de la
tabla habría que cambiar la palabra “utilizan” por “dicen utilizar”, que no es
algo menor. No es lo mismo “decir” que “hacer”. La diferencia está en la acción
(como comentábamos, las respuestas a preguntas sobre si lo hacen bien suelen
estar sesgadas a respuestas positivas)
En cuanto a las
dificultades de aplicación el informe dice:
…..metodología de evaluación, los resultados
de la evaluación, los reclamos, el establecimiento de estándares, la estructura
de gobernanza y la lista de empresas participantes o certificadas. Esta falta
de transparencia ……del riesgo de depender excesivamente de los sistemas de
auditoría y las certificaciones, debido a la preocupación que suscitan desde
hace tiempo su diseño, su credibilidad y, en algunos casos, la falta de un
impacto demostrado sobre el terreno. (énfasis añadido).
En efecto, los instrumentos deberían ser implementables y tener
impacto, producir cambios para bien, pero demostrar el impacto no
corresponde a los instrumentos, logarlo y demostrarlo corresponde a las empresas
que dicen utilizarlo. El informe no analiza este aspecto crítico.
III.
Valor agregado.
El principal
valor agregado por el informe es el inventario, inédito, de estas
certificaciones y otros instrumentos de apoyo, que son usados en los países de
América Latina, y que pueden guiar las prácticas de sostenibilidad, y en cierta medida en la forma en que las
empresas dicen que los utilizan. No obstante, esto está muy influenciado por
los componentes de la muestra, que, al querer ser de amplio espectro, deja
de ser representativa. Hubiera sido más efectivo un muestreo estratificado por
tamaño o sofisticación de las empresas. En las respuestas se mezclan, por
ejemplo, las pequeños productores que cubren el mercado local donde las certificaciones
no son relevantes y no tienen la capacidad para adoptar estándares, con grandes
productores que dependen de mercados externos, donde las certificaciones son críticas
y los estándares muy necesarios. El agregado enmascara la diversidad.
a.
“….objeto promover la coherencia y profundizar en la comprensión del
contexto y el papel que juegan…”
Este objetivo
podríamos decir que se ha cumplido.
b.
“….tendencias, retos y oportunidades clave, facilitando un enfoque más
integrado…”
Sin embargo, este
objetivo, más ambicioso, se ha logrado solo de forma parcial. Las tendencias se
presentan solo en el número de instrumentos identificados, pero no en la
forma en que han sido utilizados, a nivel de empresas y de instrumentos específicos,
a través del tiempo. En términos de retos y oportunidades el informe recopila
las opiniones de las empresa en cuanto a las dificultades que tienen en utilizar
los instrumentos y en cuanto a las oportunidades, reflejan la brecha entre
lo que dicen que hacen y lo que sería deseable en función de las certificaciones
y estándares, y por ende de los potenciales beneficios de mejorar la sostenibilidad.
Aunque en principio es deseable, las acciones para cerrar la brecha deber
ser factibles y necesarias para cada empresa en particular.
c.
Impacto.
Lo que echamos de
menos, y lo que sería un valor agregado de gran utilidad, es un análisis del impacto
que estas “iniciativas” tienen sobre la implementación de las prácticas
responsables. ¿Cómo cambia el comportamiento de
las empresas en función de los instrumentos que consideran y que dicen utilizar? Las encuestas reflejan los rubros para los
cuales dicen usarlos, pero no el cambio que logran con su adopción, si lo hacen. Quizás es mucho pedir a un estudio con estas características. Pero esto es
el razón de ser de las prácticas de sostenibilidad y, en general,
nos concentramos en los proceso y no en los resultados.
IV.
En resumen.
El informe presenta
valiosa información en el mapeo de los instrumentos y sus características.
Su adopción por parte de las empresas, que es resultado de encuestas, sin corroboración
en directa en el terreno, es de menor utilidad por los sesgos que tienen
este tipo de encuestas y en este caso, por mezclar empresas de muy diferentes necesidades
y niveles de recursos gerenciales y financieros disponibles.
[i] Se utiliza la palabra “inititatives”
en la versión en inglés-
[ii] Esta denominación es la insistencia
de la OCDE de usar términos de su creación para que parezca que es algo
diferente de los términos más usados como responsabilidad social empresarial y sostenibilidad
empresarial. Nosotros usaremos este último.
[iii] El lector interesado en los
estándares puede consultar la base de datos (¡con
partes en español!) del Centro Internacional de Comercio, donde se describen y
se pueden comparar cerca de 350 estándares de sostenibilidad.
[iv] Otro sector donde estos
instrumentos son críticos es de textiles e hidrocarburos.
[v] Un buen ejemplo de esto son los Principios y Estándares del Consejo Internacional
de Metales y Minería, ICMM.